Joomla!

Historia de las investigaciones

Aquella antigua ciudad caerá en el más absoluto olvido tras su incendio y destrucción alrededor del año 70 a.C. –antes de la fundación de las colonias Lepida Celsa y Caesar Augusta-, y quedará definitivamente deshabitada.  Sin embargo, en el invierno del año 1984 un equipo de arqueólogos del Museo de Teruel localizó sus primeros restos en un paraje agrícola denominado con el topónimo de La Caridad, en las cercanías a la ermita de la Virgen de las Cuevas.

 

La Providencia permitió que durante la segunda campaña de excavación se localizaran dos interesantes mosaicos de opus signinum, uno de los cuales alberga la ya celebérrima inscripción en escritura íbera.   Estas primeras campañas permitieron confirmar que se trataba de un hábitat urbano de cierta entidad con un urbanismo plenamente romano, que, además, conservaba un magnífico conjunto de objetos cerámicos y, sobre todo, metálicos.  De éstos se puede señalar la catapulta o lanzador de dardos, y las dos ruedas de carro localizadas en 1998.  El hallazgo en 2001 de la denominada tésera de Lazuro, una nueva inscripción en escritura paleohispánica y lengua celtíbera, supone un nuevo giro en la investigación del yacimiento, con una repercusión internacional.  En los últimos años se está interviniendo en el frente septentrional, en uno de los accesos a la antigua ciudad. 


Así, lo que comenzó siendo un pequeño sondeo, se ha convertido en un proyecto científico de investigación y de gestión patrimonial consolidado.  Desde sus inicios, es el equipo del Museo de Teruel el responsable de la gestión del yacimiento arqueológico, encabezado por los arqueólogos Jaime Vicente y Beatriz Ezquerra y la restauradora Pilar Punter.  Resultado de este trabajo, la antigua ciudad romana de La Caridad es conocida en los foros científicos internacionales, estando considerada como una de las principales ciudades hispanorromanas de época republicana de la antigua Hispania.

 

Información adicional